La verdad es que estás bajo control o que estás siendo controlado.
Para no permitir que su cerebro reptil anule su comportamiento racional,
tendría que desarrollar el hábito del autodominio. Son características
de niveles más altos de conciencia.
Las prácticas como la meditación, la atención plena y la respiración
lo ayudan a desconectarse de los estímulos que experimenta.
En lugar de pensar en tu ira o hambre de comida como parte de ti mismo,
te ves a ti mismo desde una perspectiva externa y te das cuenta de que
todo lo que sientes y piensas es casualidad.
Experimenta ciertos antojos y emociones solo por causa y efecto: algo
lo desencadena y usted inconscientemente sigue cierta rutina que ha sido
incorporada en su cerebro.
Una vez que identifique la causa, puede controlar el efecto; puede
optar por crear una respuesta diferente alejándose del evento y actuando
de acuerdo con la forma en que considere mejor.